_Abuela.
¡Qué lindo suena
en tu boca pequeña!
Sólo seis fonemas
tres golpes de voz
trenzados ellos
con dorados hilillos
invisiblemente urdidos
en un cálido tejido
de puro amor.
Versos inspirados en mi nieto Diego, a quien también suelo nombrar como «El repartidor de amor».
Desde El Cielo 
Tu poema destila tanto amor que embriaga!! Qué entrañable! Buenas noches 😘😘
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¡Son ellos los que primero nos embriagan!
¡Gracias, Lidia!
Buenas noches.
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Enhorabuena por ese repartidor de amor!!! Disfrutalo!! 😘😘😘
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Muy bonito. Yaya no queda tan bien y tiene menos rimas, pero sabe también a miel.
Un abrazo.
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¡Por supuesto ; viniendo de ellos siempre sabrá a miel!
Un abrazo.
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que grandes las abuelas
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Mis nietos aún son muy pequeños, pero son una fuente inagotable de amor para mí.
¡Gracias por comentar!
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