Reto – febrero
Crea un microrrelato o poesía (máx. 100 palabras) inspirándote en la carta.
En tu creación debe aparecer el objeto del dado: mano / manos.
Opcional
Incluir el invento de la cerilla o el año de su invención.
Complicidad
La abuela dormitaba en su vieja poltrona. Pepe cogió sus manos suavemente y ella, sin abrir los ojos, lo reconoció.
_Ya sé lo que quieres, necesitas ayuda para una tarea. Pero será a cambio de algo: me traerás cerillas; las han escondido, me prohibieron fumar.
Pepe asintió y le explicó. Fue preguntando y tomando nota asombrado de la claridad de sus recuerdos. Luego, ella siguió durmiendo y él aprovechó de completar su árbol genealógico agregando la figura de su abuela. Era lo menos que podía hacer, además de las cerillas, claro. Satisfecho y feliz la besó en la frente y silenciosamente salió.
Esta es mi participación en el reto Escribir jugando del blog de Lídia
Que buenooo
https://exitospoeticos.wordpress.com
Me gustaLe gusta a 1 persona
¡Muchas gracias!
Un abrazo
Me gustaMe gusta
Como la vida misma y con mucha ternura. Me ha encantado, Sari.
Me gustaLe gusta a 1 persona
Feliz de que te haya gustado, Julie. Los niños y las abuelas están unidos por el amor y la ternura.
¡Besos!
Me gustaLe gusta a 1 persona
Qué tierno, Sari. Ay, esa memoria con pasajes claros y otros difuminados. Ese beso en la frente demuestra tantísimo amor…
Un abrazo
Me gustaMe gusta
Me encanta tu apreciación, Luna; dicen que la memoria inmediata es la que falla primero (ya lo he notado…snif, snif…)
¡Abrazos!
Me gustaLe gusta a 1 persona
¡Qué bonito, Sari! 😀 La escena que nos has descrito de alguna manera me ha recordado a una película de animación llamada «Coco». Esa complicidad entre el nieto y su abuela y el hecho de que puedan compartir esos momentos llenos de sabiduría… A veces es tarde para aprender de los mayores… cuando nos damos cuenta, ya se han ido.
Muchas gracias por participar en el reto.
Un abrazo bien grande 🙂
Me gustaLe gusta a 1 persona
No he visto la película. Dicen que hay que apapachar a los nietos cuando están pequeños; que después crecen y no «pescan» a los abuelos. Cuando son adultos vuelven, pero a esa altura los abuelos ya no están. En fin, me consuelo recordando que también puede haber excepciones.
No me agradezcas: ¡el reto es un muy buen ejercicio para mis neuronas!
¡Otro abrazo de vuelta!
Me gustaLe gusta a 1 persona
¡Muy tierno!
Tus relatos con consigna me recuerdan de cuando concurría a clases de literatura y ponían consignas para cuentos
Hay varios en este blog y en mi libro de cuentos cortos y poesía.
Un abrazo.
Me gustaLe gusta a 1 persona
Disculpa mi ignorancia, pero no tengo claro el concepto de consigna en el relato, Luis. De igual manera agradezco tu comentario.
Un abrazo
Me gustaLe gusta a 1 persona
Consigna es cuando te dan un tema para que hagas un cuento sobre él.
Por ejemplo, uno que me dieron: Una roca…
¿Algo difícil, no?
Me gustaLe gusta a 1 persona
Ahora comprendo, ¡gracias! 😊 Bastante difícil el tema de la roca; pero seguro que te fue muy bien.
Me gustaMe gusta
El cuento está en el libro y en el blog.
Que pase bien.
Me gustaLe gusta a 1 persona
Dejas tus huellas cuando escribes. La ternura se palpa y se disfruta. Muy bueno tu relato.
Me gustaLe gusta a 1 persona
¡Gracias Manuel! Y tú eres muy generoso con tus comentarios 😊
Un abrazo
Me gustaLe gusta a 1 persona
¡Genial! Me encanta.
Un abrazo Sara
Me gustaLe gusta a 1 persona
¡Gracias, Marisa! 😀😀😀
¡Un abrazo grande!
Me gustaMe gusta
La complicidad con la abuela… la ha plasmado muy bien en este relato tan tierno. Muy bonito, Sari.
Un gran abrazo.
Me gustaLe gusta a 1 persona
¡Gracias Estrella! Es un vínculo muy especial, de seguro lo tienes bien comprobado.
Deseando estés bien. ¡Un afectuoso abrazo!
Me gustaLe gusta a 1 persona
Pingback: EJ: Creaciones participantes | El Blog de Lídia
Me encanta esa complicidad entre abuelos y nietos… la he vivido, la he visto y veo en mi hija con sus abuelos, y no veo la hora de revivirla con un/a nieto/a…
Me encantó… un beso.
Me gustaLe gusta a 1 persona
Ni cuenta te darás cuando seas tú la que vivas ese nexo tan especial que se crea. Tengo tres nietos y lo disfruto a menudo.
¡Gracias por comentar, Alma! te llamas igual que mi nieta menor 😊😍
¡Un abrazo!
Me gustaLe gusta a 1 persona
Es algo bonito esa complicidad. Es como que el círculo se cierra, como que los abuelos ven en sus nietos aquellos que casi olvidaron.
Muy tierno. Un placer leerte.
Me gustaLe gusta a 1 persona
Lo que se olvidó de cuando los hijos eran pequeños y el tiempo se volvía escaso entre trabajar y criar, a la vez.
Muchísimas gracias, Maga por tu lindo comentario.
¡Un abrazo desde Chile!
Me gustaMe gusta